19 de diciembre de 2010

Bigotes

Madre: Niña, te tienes que hacer la cera en esos bigotes.
Hija [dudosa]: ¿Tú crees?
Madre [firme]: Sí. Mírate. Hay una edad...
Hija [interrumpiéndola]: Si es que estoy harta de depilarme.
Madre: Quién lo iba a decir.
Hija: Las piernas, las cejas, las ingles... No quiero quitarme más pelos ya, que una vez que empiezas ya no puedes parar. Es una esclavitud.
Madre: Pero es que con esos bigotes no puedes ir por la calle.
Hija: Cómo que no.
Madre: No. Porque...
Hija: Yo todo esto lo tengo muy pensado. Si hubiese dedicado a estudiar todo el tiempo y el dinero que he gastado depilándome en los últimos veinte años, tendría seis carreras.
Madre: Ya. ¿Y para qué te iban a servir seis carreras con esas pelambres?

9 comentarios:

si, bwana dijo...

Unos se quejan por lampiños y otras por hirsutas. ¡A ver si nos conformamos y pasamos unas fiestas en paz!

Rodericus dijo...

Pues yo cro que un bigote debidamente cuidado favorece basatante.

Saludos.

Ginebra dijo...

Yo me he dejado ya las cejas y las piernas y me estoy pensando lo del bigote.

la de Dibujo dijo...

Las cejas, lo justico para poder hablar de ellas en plural, oye.

Javier Coria dijo...

A uno, que sigue llamando "entraditas" a lo que son "salidas" de una más que rotunda calvicie, no es un asunto que le guste tocar, la del pelo, digo. Aunque como el argentino filósofo pienso que si el pelo fuera importante iría por dentro.

aire dijo...

A mí me enseñaron que un buen bigote siempre se ha considerado todo un toque de distinción.

Blanca Villa dijo...

Una única palabra. Un único concepto liberador: láser. Y a partir de ahí, la felicidad, el nirvana, el edén... Pa qué seguir. Oh.

Arantza dijo...

Y eso no es nada, la última vez que fui al polideportivo constaté con gran azoramiento que la depilación del biquini ha pasado a palabras mayores: vamos, que lo impúber se impone. Y afirmo con rebeldía que ni jarta de droga me pongo yo a la moda. El primero que me lo exija tendrá que hacerse antes la cera en el escroto. Uy, ya escribí "escroto" en su blog. Mil perdones.

Rahelilla ★ dijo...

Jajaaa que arte. Muy bueno y real como la vida misma, hace años que te leo y he pensado que ya es hora de que me deje caer con un comentario. Eres muy especial escribiendo, me encanta, y me siento con la necesidad de agradecerte que escribas en el blog porque siempre me animas cuando te leo. Besos